lunes, 28 de marzo de 2022

Para tu adiós

 


PARA TU ADIÓS

Amigo,
¡qué derroche de colores!
en este setiembre vespertino
que esconde en sus manos
el horizonte.

La pulcritud de su cielo
entre rosa y lila,
sobre un mar vítreo,
me habla de tu despedida.

Amigo,
tú que amas el mar,
yo te ofrezco
un cardumen
de peces sencillos,
que viajan violáceos
y dorados,
en las onduladas aguas
que tú respiras.

Desde mi bosque
poblado de hojas
verde azuladas,
que setiembre pintó
en secreto,
yo te ofrezco mis versos
que cuelgan
como niños traviesos
de los columpios
de este invierno lento.

Para tu adiós amigo,
es este jardín
colorido de sombras,
y nísperos dulces
que rodaron al suelo.

A ti
mi dolor y mi canto
te entrego.

INGRID ZETTERBERG

Dedicado a mi amigo poeta
Pedro Ferreyra de Mundopoesía.com

De mi poemario
"Tu luz y mis versos"

Derechos reservados
Safe Creative Cta. 1006080193112

sábado, 19 de marzo de 2022

¡Despierta!

 



¡DESPIERTA!

¡Qué triste es
sin amor
amarte!

Pájaro agreste
sin alas
que se estrelló
en tu mirada
es este sentir
que de mi pecho
emana.

Vagan sombras
aferradas
a tu alma.

Y no puedo 
luchar
contra esa
muralla.

¿Quién conoce
tu entraña?

No lo sé.

Silencio,
como letargo
de besos
que huyen sin ser.

¡Despierta!

que ya las sombras
se dispersan
de este raro sueño.

Promesa 
que se detiene,
promesa
que se acerca
en raudo vuelo;

para amarte
como antes,
para amarte
como después.

INGRID ZETTERBERG

Febrero 2,010

lunes, 14 de marzo de 2022

La olvidada de Dios

 


LA OLVIDADA DE DIOS

Niña de cabellos revueltos,
¿quién le dio a beber
esa copa de amargura?
Bocas feroces
y hambrientas de sangre
se dilataron contra su faz.
Y tambaleante y herida
caminó hacia su muerte.
Sus ojos se nublaron
bajo un sol inclemente.
Y como un ave aturdida
cayó entre los gritos
de la turba cruel.

Nadie conoció su nombre,
se llamaba Blanca azucena,
marchita y hollada
por gente perversa.
Nadie sabía su edad,
tenía todos los años
que pueden caber en la soledad.

Pasarán los años,
los otoños, los inviernos
o alumbrará el sol indiferente
sobre el mundo inhóspito
que conocemos;
pero el recuerdo de su tragedia
atisbará en mis ventanas
por siempre.
¡La olvidada de Dios!
la que consumió el fuego
de los devoradores,
de los que acusaban con el dedo.
Chusma injusta, amotinada
en derredor de aquella alma,
para darle muerte.

Marchítense las flores,
abranse los capullos tiernos
o arrullense las palomas,
pero la hoguera
que consumió su joven vida
apagará mis sonrisas para siempre.
¡La olvidada de Dios!
a quien se le negó
un minuto de piedad.

La que encendida
como antorcha viva
pidió clemencia
a sus torturadores,
y no hubo una mano
que se alargara
para salvarla.

La condenada
por las blasfemias
y los gritos hirientes
en la plaza del pueblo.
¡La olvidada de Dios!
vivirá por siempre
en mi recuerdo.
Y su martirio
como lumbre de fuego eterno.

INGRID ZETTERBERG

P.D. Inspirado en un caso de la vida real,
cuando en Guatemala se acusó de asesinato
a una chica de 19 años y la quemaron viva,
sin tener pruebas contra ella. 

sábado, 12 de marzo de 2022

Esplendor universal

 


ESPLENDOR UNIVERSAL

Oh constelaciones silenciosas
que viajan en amoroso ritmo
por el aliento del Creador.

Vibraciones majestuosas
que emana el cantar del Eterno,
colores ámbar y bermejo
se unen en una cadencia melodiosa,
mientras giran los planetas
en una espiral de amor;
y la dorada escarcha
de las estrellas
va dejando pinceladas
de magnificencia.

Oh paraje infinito
de un crepúsculo en eternidad,
belleza universal
que muestra los anillos de Saturno
girando en suavidad,
en armonía con la vida
en la expansión celestial.

Estrellas ígneas van descendiendo
del cálido universo,
llamaradas de esplendor en ofrenda
desde las manos santas
del artista Supremo.

INGRID ZETTERBERG

La felicidad se fue

  LA FELICIDAD SE FUE Me he asomado a un sol de melancolía, en esta ventana vespertina que ha mirado mis lágrimas. La felicidad se ha ido de...