CUANDO TODO ME DIGA ADIÓS
Quizás un día
ya no estaré aquí.
Me llevaré lejos
esta melodía que llora;
mis letras empolvadas
por las calles
buscarán a las almas.
Un refugio,
un resquicio para entibiarse.
Quizás un día
yo diga adiós a este canto,
que arrastra lamentos.
Trinos gloriosos
cruzarán los vientos,
y los álamos
se mecerán serenos.
Y esa guitarra que sangra
no traerá más mis versos.
¡Cuánto daño de pronto
me hará el silencio!
Los pastizales en calma
bajo el mismo cielo
habrán de decirme adiós.
INGRID ZETTERBERG
Querida Ingrd : A alguien tan valioso y de alma tan maravillosa como tu no me es posible decirle adios.
ResponderBorrarAbrazo grande y gracias por tan hermoso poema.
Gracias querido Ricardo por asomarte a mis versos y dejarme tan lindo comentario. Un abrazo con mi cariño.
Borrarsaludos estimada.
ResponderBorrarpese a todo es de esperar que queden tus palabras y de ellas muchos redescubran el gran ser que habita en vos.
Te dejo un abrazo.
Gracias Meulen, y disculpa la tardanza, pero estuve de viaje por España, y recién regresé el 10 de setiembre. Un abrazo grande.
BorrarHondura en tu sentir. Inmenso poema!! Un gran abrazo
ResponderBorrarGracias Hanna por recorrer mis versos y dejarme tan bella respuesta. Un abrazo fuerte.
BorrarSolo a de esperarse que cuando uno se vaya , se vaya en paz con Dios. Lo demás es brisa ligera.
ResponderBorrarSaludos,espero estés bien.
Si amiga, estoy bien, regresé de España el 10 de setiembre casualmente, y es por eso que he tardado tanto en entrar a los blogs. Y si, lo más importante es irnos en paz con Dios cuando nos toque partir. Un abrazo.
Borrar